Los perros son unas de las especies más amadas en la tierra y en la actualidad somos muchas personas que defendemos hasta el final los derechos de estos animalitos y de los demás reinos. Pero, ¿te has puesto a buscar cómo eran las diferentes razas de perros hace años atrás? Hace 100 años, muchas razas no eran físicamente como lo son hoy en día, y estos cambios se deben principalmente al hombre que, desde el momento que tomó el poder de la evolución en sus manos no ha dejado de experimentar. Estos cruces, que fueron producto de la selección de parejas para su reproducción, generaron en los animalitos algunas deformaciones o enfermedades, pero también se crearon nuevas razas que fueron cambiando poco a poco de generación en generación y aquí te las presentamos.
Bull Terrier: Podríamos acotar que esta fue la raza que más cambió a causa de la “selección artificial” por parte de los humanos. Cien años atrás, estos perritos no tenían el hocico tan ovalado como lo podemos ver hoy en día, las orejas también cambiaron pero los ojos triangulares y pequeños se siguen manteniendo. Tienen dientes supernumerarios y persiguen su cola compulsivamente. Son muy propensos a agarrar alguna enfermedad de la piel y si mencionamos la opinión de las personas, hay muchos que prefieren otra raza por el aspecto físico, pero en realidad, si hablamos de comportamiento, los Bull Terrier, son de los más adorables que existen.
Bulldog Inglés: Otra raza que a simple vista se puede notar el cambio. Hace cien años, el Bulldog no tenía tantas arrugas en su cuello como hoy en día y el tamaño de su nariz lo ha condenado a sufrir muchas enfermedades respiratorias. Además estos perritos de contextura gruesa y pesada son propensos a sufrir de los huesos y su vida tiene un promedio de 6 a 25 años. Son sumamente delicados pero encantadores, estos canes hay que saberlos cuidar y brindarles mucho cariño, por supuesto.
Pug: Los Pugs son definitivamente perros de compañía, totalmente amorosos, sociables y alegres. Ideales como mascotas para niños. Si vemos las fotos, esta raza ha cambiado en cuanto a su aspecto físico, ya que actualmente presenta muchas más arrugas que su antepasado, además su hocico es completamente plano, poseen una dentadura complicada, ojos saltones y tiene toda la cara arrugada, convirtiéndolo así en un perro que provoca abrazarlo y tocarlo con solo verlo, pero si hablamos de salud, estos canes podrían presentar problemas cardíacos, dificultades en su respiración, presión arterial alta y otras enfermedades que hacen que sea una raza totalmente delicada.
Dachshund: O también conocidos como perros salchichas, son otra de las razas que han cambiado al pasar el tiempo y por intervención del hombre, en las fotos podemos apreciar que estos canes siempre han sido de tronco largo, pero sí se notan las modificaciones, principalmente en su pecho, ya que ahora es más ancho sobresaliendo un poco y sus patas delanteras ahora son más cortas, logrando con esto que presenten problemas de columna, resultando en parálisis. Además, los ejemplares con sobrepeso pueden verse afectados con mayor facilidad, por lo cual se recomienda, si tienes algún perro de esta raza, cuidar muy bien su alimentación.
Pastor Alemán: En la antigüedad, los perros de esta raza eran totalmente ágiles en sus movimientos y atléticos, lograban saltar un mural de más de 2,5 metros de altura, en cambio, los ejemplares que conocemos hoy en día, son mucho más pesados y no podrían alcanzar esa altura en sus saltos, esto se ve implicado también por la contextura actual, ya que su antepasado lograba un peso de 25Kg mientras que el actual alcanza hasta 38Kg.
San Bernardo: Estos perros han crecido monumentalmente al pasar los años, además que su pelaje es más frondoso en la actualidad, son robustos y no tan delgados como sus antepasados. El San Bernardo es esencial no solo para cazar sino también para ubicar a personas atrapadas por la nieve, ya que no se ve tan afectado por la cantidad de piel y pelos que tiene.
Estas son solo algunas razas que han sido modificadas por el hombre debido a la “selección artificial”, dicha práctica se continúa realizando porque aun existen personas interesadas en el aspecto físico del perro más que el cariño que se les puede brindar para que vivan felices (esto sin contar la cantidad de felicidad que nos hacen sentir), sin importar la raza que sea. Con esto, queremos incentivar a todos los lectores que deseen tener una mascota, restarle importancia a la apariencia, simplemente adoptarlos y regalarles mucho amor, ya que así estaríamos ayudando a cada perrito que se encuentra sin hogar, además comenzaríamos a eliminar ese afán de hacerlos más vistosos, como si de una exposición se tratase, y que llega al punto de deformarlos causando problemas de salud a todos estos animalitos intervenidos. El mejor consejo que podemos darles es ofrecerle afecto a todas esas especies (ya sean de “raza” o “mestizos”) y recordarles que cada can es único y especial, no existe necesidad de intervenirlos genéticamente para poder tomarlos en cuenta. ¡Hay que dejar que la naturaleza siga su curso!